Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

viernes, 6 de agosto de 2021

 

Estoy tumbada en la cama con la mirada perdida. No estoy aquí desde luego. Mi cuerpo si pero yo no estoy aquí. Pienso en ti y desaparezco. Pienso en el tacto de tu alma y la mía y en que jamás había sentido que otro ser pudiera hacerme sentir de esta manera. Y me hago pequeñita. Y me consiento aunque solo sea por unos minutos cerrar los ojos y hacerte presente dentro de mí. Y consigo sentir lo que sentía cuando estabas tan cerca que casi podía respirarte. Y tengo miedo porque con nadie es igual. Porque te echo de menos y no puedo decírtelo. Porque aunque lo hiciera no te lo diría a ti sino a alguien que ya no eres tú. Y sé que tu cuerpo existe, sigue existiendo, y me confunde. Cierro los ojos y por un momento nada ha cambiado. Pero sé que solo puedo permitirme unos minutos. Luego abro los ojos y sin darme cuenta hay una lágrima que me recorre la mejilla. La seco. Y me levanto de la cama. 

Eso es lo más cerca que voy a estar de ti.