Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

viernes, 26 de julio de 2013

Del dicho al hecho hay un abismo. Y en ese gran abismo que se asimila a una eternidad, se arrojan tantas cosas que el dicho se olvida y el hecho se queda anclado en simples palabras firmadas al viento que se convierten en pasado y el pasado a veces se ve tan lejano que parecen centenares de miles de años los que han transcurrido desde que me movía como una luz intensa hasta que me convertí en una simple sombra de la que no recuerdas su brillo, porque a veces falta pararse a pensar que si todo lo que estás ganando vale todo lo que estás perdiendo. Que lejano quedan ya demasiadas cosas que un día formaron parte de un todo, y hoy has dejado apartadas en un segundo plano en el que no estarán siempre, ya que, o eso me dicen (el amor hay que cuidarlo, al menos una vez al día) Porque nunca se sabe cuando el presente se convertirá en pasado, y la frontera entre ambos cierra por vacaciones