hay una lágrima encajada
tan delicadamente
colocada con tal sutileza
en alguna parte de mis manos
que simplemente vive seca
Todo le transporta, su mundo ya no es este, detesta tener que volver tan solo un segundo más, pide bajo este cielo azul celeste, no quiero irme de esta habitación para dos almas que son libres.
La vida es curiosa.
Hay quien se va dejándote un trauma que esconderás hasta que irremediablemente otro ser humano que poco tiene que ver lo acabe descubriendo y lo toque con cuidado. Yo creo que es profundamente injusto.
Hay gente que se va de tu vida sin ser consciente de la repercusión de sus actos en tus inseguridades y hay gente que está en tu vida que es consciente de lo que te ha pasado y con todo el miedo que sabe que tienes sigue creyendo en ti.
La vida es curiosa, si.
La primera vez que me enamoré tenía 16 años.
La segunda vez que me enamoré tenía 26.
Sé que no me enamoré otras veces porque hubo otras personas que quise pero no me enamoré de ellas.
Ahora tengo 28 años. Y quizá tengan que pasar 10 años otra vez para que vuelva a pasar. No lo sé.
Pero me sigue pareciendo un milagro tan increíble que para mí ya es una suerte haberlo sentido en mi vida.