Si has llegado a ver en otros ojos
retazos de una vida futura,
soñada,
si en esos ojos fuiste espejo
y llegaste a poder verte,
si te hiciste la cama en ellos
y pudiste soñar
incluso con otro tiempo,
en esa cara,
sigo sin entender
cómo si todo aquello
traspasó la dermis,
se pudo desvanecer
y aparecer en otra mirada.
¿Y si acaso fue más el hambre
que tenías... que mi carne?