Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

martes, 23 de noviembre de 2021

 

Me enamoré de tus alas.

Por eso jamás busqué retenerte. Yo admiraba tus alas, tu libertad era un pequeño tesoro para mí. Saberte siempre libre. El cielo cogió otro color para mí cuando me enamoré de tu libertad. Fuiste para mí un sueño que viví sin necesidad de estar dormida. Sentí que soñaba estando a tu lado. Es una suerte tan grande sentirse así que jamás habría cortado las alas a quien me ha hecho soñar de esta manera. Porque desde entonces, cambió la conjugación de ese verbo. Tus alas. Tu vuelo libre era para mí un regalo. Es un regalo. 

Jamás habría querido robarte el cielo.