Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

viernes, 3 de septiembre de 2021

 

Hola. 

He pensado en ti. Otra vez. Vuelvo a estar aquí, recuerdo estas paredes. Recuerdo haber sido libre en ellas. Más libre que nunca en mitad del robo de mi libertad como derecho, tú, tú y tus manos me hicisteis más libres que nunca. Esa es una de las cosas que siempre me han gustado más de ti, tu libertad. Tu libertad es lo más bonito que me diste porque a través de ella, conseguiste darme exactamente lo mismo a mí. Tu libertad fue lo primero que quise de ti, antes incluso de saber tu nombre. Es esa libertad la que te hace feliz, la que te permite soñar, con la que siempre querré que camines descalza. Cuánto significa para mí tu libertad. Te quiero libre. Eso fue lo primero que te dije aquel día en Cartagena, cuando entré a esa tienda y vi esta postal: "Tú eres en todas partes, eternamente libre" Lo que siempre amaré por encima de todo. Tus alas libres. Me gustan tus alas libres. Vuela libre. Siempre sé libre, eso es todo lo que pido para ti. Tus alas para volar, que encuentres donde posarlas, que vueles otra vez, que las poses de nuevo, y que vuelvas a volar, que alguna vez te sientas libre encerrada, que camines libre, que vivas libre, que encuentres tu lugar y que nunca te alejes de él, como decía en Sincericidio. Que tengas la fortuna que eso supone. Eso es lo que sé de querer. 


Cuánto te quiero