Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

viernes, 25 de marzo de 2022

 

Aquellos fines de semana en los que estábamos todos los amigos, con la juventud viva y repleta de ganas de comernos la noche y el mundo.

Que acabábamos bailando todos juntos, borrachos con los ojos cerrados. Que absolutamente toda la vida se concentraba en ese instante de subidón extremo.

Aquellos fines de semana. Aquella pandilla que fuimos y que siempre seremos. Todas las veces que nos quedamos sin aire de tanto reír. Aquellos abrazos en los que decíamos cuánto nos queríamos pero de verdad, sin censura, con el corazón despierto.

Los besos en la boca en cualquier baño. Y qué más daba. 

Es lo mejor de los recuerdos, que puedes volver cuando quieras y volver a sentirlo todo otra vez. Llamarlos a todos y decirles “os acordáis de cuando…” y que al otro lado del teléfono siempre se oiga una risa, un suspiro y un silencio que significa: gracias.