Sé que existes. Que estás allí, en algún lugar, esperándome. Pero no te preocupes, nos acabaremos encontrando. Al fin y al cabo, no sabes quien soy.

CVL

miércoles, 23 de febrero de 2022

 

Pasé tanto tiempo frente a tu puerta que cuando me levanté y di el primer paso hacia cualquier otra parte que no fuera tú calle 

No sé si tenia más dormidas las piernas o los ojos de pensarte tanto 

Yo que creía en los milagros desde que me dijiste tu nombre ahora veía ordinario hasta el cielo que ya nunca lloverá como lo hacías tú, -quiero decir, como lo hacíamos nosotras- y conseguíamos por un momento que hasta nos tuviera envidia y entonces nos daba el sol porque entendía que no podía competir con como nosotras nos mojábamos las ganas.


Tuve que reconocer que los caminos donde más dejamos de nosotros están irremediablemente destinados a olvidar nuestras suelas y aprendí a vivir creyendo que hay miradas que siempre quedaran  mejor enmarcadas en un recuerdo que encerradas en una jaula 


Entonces,

Entendí que tu presencia duró el momento exacto para saber que hay mujeres que no se acaban nunca

Que hay amores que hablan más de nosotros que lo que nosotros hemos conseguido decir jamás


Y he de reconocer que sentí miedo cuando comprendí que lo que realmente quizá me habías quitado no era lo que yo pedia, 

Sino lo que en un sentido más único,

Más intrínseco 

Y más absolutamente posesivo me pertenecía,



Mis palabras