En noches como esta pienso en ti. Pienso en tu risa, en el hueco de tu cuello donde apoyar mi cabeza y que ese gesto baste para decir te quiero. Pienso en ti. En tu tacto, en tu frío. Pienso también en tu calor, y pienso en que quiero formar parte de él aunque solo sea esta noche. Aunque solo sea para sentir que duermes y que nadie podría hacerte daño porque yo estaría cerca para empujar todo aquello que pudiera provocarlo. Pienso en ti. Y miro esta noche, y la siento seca porque me gustaría que la vivieras conmigo. Fíjate, una noche, simple tiempo, unas horas, fíjate, sin darnos cuenta ya casi es mañana.
Y yo con esta noche, si es contigo, ya viví.